Para conocer de antemano que es un Panóptico, nos debemos remitir al siglo XVIII en donde el filósofo Jeremy Bentham lo diseñó. Esta estructura estaría destinada como centro penitenciario ideal, permitiendo a un vigilante observar (-opticón) a todos (pan-) los prisioneros sin que éstos puedan saber si están siendo observados o no.-
La estructura de la prisión incorpora una torre de vigilancia en el centro de un edificio anular que está dividido en celdas. Cada una de estas celdas comprende una superficie tal que permite tener dos ventanas: una exterior para que entre la luz y otra interior dirigida hacia la torre de vigilancia. Los ocupantes de las celdas se encontrarían aislados unos de otros por paredes y sujetos al escrutinio colectivo e individual de un vigilante en la torre que permanecería oculto. Para ello, Bentham no sólo imaginó persianas vecinas en las ventanas de la torre de observación, sino también conexiones laberínticas entre las salas de la torre para evitar destellos de luz o ruido que pudieran delatar la presencia de un observador.-
De acuerdo con el diseño de Bentham, éste sería un diseño más barato que el de las prisiones de su época, ya que requiere menos empleados. Puesto que los vigilantes no pueden ser vistos, no sería necesario que estuvieran trabajando todo el tiempo, dejando la labor de la observación por instantes. Aunque el diseño tuvo efectos limitados en las cárceles de la época de Bentham, se vio como un desarrollo importante (Wikipedia).-
En el siglo XX Michael Foucault usó el diseño del panóptico como archi-metáfora del poder moderno en donde los “internos” están confinados a una celda en donde no pueden moverse o todo mínimo accionar o voluntad de movimiento está condicionado a “la presunta mirada” del vigilante (poder). El dominio del tiempo, el espacio, el movimiento y el desgaste-rutinario eran las armas para mantener inmóviles, dóciles y sin ninguna oportunidad de sublevación evasiva a cada interno.-
Desde mi perspectiva la archi-metáfora del panóptico la asignaría no solo con/hacia la exterioridad del sistema o el poder, sino incluyendo conceptos fenomenológicos existenciales de una conciencia-mundo que “permite” y es participe de forjar las propias murallas y las ataduras que lo aprisionaran pero que a su vez le darán la protección, la pertenencia.-
Las conciencias alienadas que el sistema con-tiene conforman en su mayoría al plantel de “reclusos”, que en su mayoría el deseo se ha materializado a tal extremo que solo se concreta en la “cosa” y nunca en la acción; por ello los deseos de muchos dentro del panóptico, NO es escapar y subir a lo más alto reduciendo al vigilante sobre la torre, para que todos no sean más vigilados, contralados, sentenciados; en pos de obtener la libertad de movimiento de acción del grupo, la masa, liberándolos. No, para nada, lo que quieren es permanecer en sus celdas protegidos, forzando y construyendo desde adentro la torre, su torre; para ocupar un puesto privilegiado, poderoso, fuera de la masa, de lo juzgable, viendo y no siendo visto, señalando responsabilidades y no responsabilizándose; olvidándose de los suyos, de sus hermanos, o sea construir UNA prisión dentro de otra prisión, una estructura amurallada dentro de una super-estructura opresiva, vallada perimetralmente por muros, alambradas electrificadas, fosas, guardias armados, sirenas, reflectores, perros, etc., etc..-
Está tan obsesionado y acurrucados en UNA supuesta verdad, UNA postura, su ego, su comodidad, que olvida completamente que al lado suyo, en la otra celda, hay otros por quien luchar; y en vez de juntar fuerzas para destruir el panóptico foucaultiano, maniatar al guardia, cortar las cadenas y derrumbar los muros, se dedican obsesivamente a reforzar sus paredes, poner más candados y engrosar los barrotes, los “códigos de barra”, de su propia prisión, en un acopio grotesco y desbocado de "mercancías", de cosas que aunque lo asfixien, le dé poco “espacio”, logran hacerle....olvidar los miedos.....a la libertad..... a equivocarse, a ir en contra una corriente, a decir una palabra (de uno) y no siempre "robada" de las habladurías que se titulan a/en Diario/s.....
O sea que quieren negar la realidad, el cambio y viven bajo "lo que se dice" con la mirada y los oídos perdidos en los distintos aparatos-murales que su espacio-ego les brinda, bajo el cobijo del poder que los convierte en sujetos-sujetados, negando con las cosas, los ruidos, las constante noticias-primicias-cotorreos, convirtiéndose en un loro-repetidor y voz-pensamiento-ajeno o más bien robado; negando al mundo que lo rodea pero principalmente negando enfermizamente su inevitable finitud….. Su humanidad.-
En este hacinamiento corporal y mental, cada uno de los reclusos ordenara como pueda su celda de tal forma que las ventanas al exterior estén libres, para que puedan ser visto, no ellos, sino lo que poseen, las “cosas” que los hacen quien-es o que (cosa) pretenden Ser; ya sea en sus sueño quimérico en lo alto o en lo bajo de la circularidad viciosa en que realmente viven y estarán confinados indefectiblemente a una condena…...perpetua.-
La estructura de la prisión incorpora una torre de vigilancia en el centro de un edificio anular que está dividido en celdas. Cada una de estas celdas comprende una superficie tal que permite tener dos ventanas: una exterior para que entre la luz y otra interior dirigida hacia la torre de vigilancia. Los ocupantes de las celdas se encontrarían aislados unos de otros por paredes y sujetos al escrutinio colectivo e individual de un vigilante en la torre que permanecería oculto. Para ello, Bentham no sólo imaginó persianas vecinas en las ventanas de la torre de observación, sino también conexiones laberínticas entre las salas de la torre para evitar destellos de luz o ruido que pudieran delatar la presencia de un observador.-
De acuerdo con el diseño de Bentham, éste sería un diseño más barato que el de las prisiones de su época, ya que requiere menos empleados. Puesto que los vigilantes no pueden ser vistos, no sería necesario que estuvieran trabajando todo el tiempo, dejando la labor de la observación por instantes. Aunque el diseño tuvo efectos limitados en las cárceles de la época de Bentham, se vio como un desarrollo importante (Wikipedia).-
En el siglo XX Michael Foucault usó el diseño del panóptico como archi-metáfora del poder moderno en donde los “internos” están confinados a una celda en donde no pueden moverse o todo mínimo accionar o voluntad de movimiento está condicionado a “la presunta mirada” del vigilante (poder). El dominio del tiempo, el espacio, el movimiento y el desgaste-rutinario eran las armas para mantener inmóviles, dóciles y sin ninguna oportunidad de sublevación evasiva a cada interno.-
Desde mi perspectiva la archi-metáfora del panóptico la asignaría no solo con/hacia la exterioridad del sistema o el poder, sino incluyendo conceptos fenomenológicos existenciales de una conciencia-mundo que “permite” y es participe de forjar las propias murallas y las ataduras que lo aprisionaran pero que a su vez le darán la protección, la pertenencia.-
Las conciencias alienadas que el sistema con-tiene conforman en su mayoría al plantel de “reclusos”, que en su mayoría el deseo se ha materializado a tal extremo que solo se concreta en la “cosa” y nunca en la acción; por ello los deseos de muchos dentro del panóptico, NO es escapar y subir a lo más alto reduciendo al vigilante sobre la torre, para que todos no sean más vigilados, contralados, sentenciados; en pos de obtener la libertad de movimiento de acción del grupo, la masa, liberándolos. No, para nada, lo que quieren es permanecer en sus celdas protegidos, forzando y construyendo desde adentro la torre, su torre; para ocupar un puesto privilegiado, poderoso, fuera de la masa, de lo juzgable, viendo y no siendo visto, señalando responsabilidades y no responsabilizándose; olvidándose de los suyos, de sus hermanos, o sea construir UNA prisión dentro de otra prisión, una estructura amurallada dentro de una super-estructura opresiva, vallada perimetralmente por muros, alambradas electrificadas, fosas, guardias armados, sirenas, reflectores, perros, etc., etc..-
Está tan obsesionado y acurrucados en UNA supuesta verdad, UNA postura, su ego, su comodidad, que olvida completamente que al lado suyo, en la otra celda, hay otros por quien luchar; y en vez de juntar fuerzas para destruir el panóptico foucaultiano, maniatar al guardia, cortar las cadenas y derrumbar los muros, se dedican obsesivamente a reforzar sus paredes, poner más candados y engrosar los barrotes, los “códigos de barra”, de su propia prisión, en un acopio grotesco y desbocado de "mercancías", de cosas que aunque lo asfixien, le dé poco “espacio”, logran hacerle....olvidar los miedos.....a la libertad..... a equivocarse, a ir en contra una corriente, a decir una palabra (de uno) y no siempre "robada" de las habladurías que se titulan a/en Diario/s.....
O sea que quieren negar la realidad, el cambio y viven bajo "lo que se dice" con la mirada y los oídos perdidos en los distintos aparatos-murales que su espacio-ego les brinda, bajo el cobijo del poder que los convierte en sujetos-sujetados, negando con las cosas, los ruidos, las constante noticias-primicias-cotorreos, convirtiéndose en un loro-repetidor y voz-pensamiento-ajeno o más bien robado; negando al mundo que lo rodea pero principalmente negando enfermizamente su inevitable finitud….. Su humanidad.-
En este hacinamiento corporal y mental, cada uno de los reclusos ordenara como pueda su celda de tal forma que las ventanas al exterior estén libres, para que puedan ser visto, no ellos, sino lo que poseen, las “cosas” que los hacen quien-es o que (cosa) pretenden Ser; ya sea en sus sueño quimérico en lo alto o en lo bajo de la circularidad viciosa en que realmente viven y estarán confinados indefectiblemente a una condena…...perpetua.-
